Crítica de prensa del Diario de Levante al concierto ofrecido por el pianista Nelson Goerner junto a la Orquesta de Valencia y bajo la batuta del director Yaron Traub.

Otro << Segundo >>, pero de primera


<< La sustitución a última hora del enfermo Arcadi Volodos por el argentino Nelson Goerner (San Pedro, 1959) trajo consigo la del anunciado Segundo de Brahms por el Segundo de Rachmaninov. Fue otro Segundo, pero de primera. >>

<< El buen hacer de un solista riquísimo en colores tímbricos y matices de fraseo compensó. Y, entre uno y otro, la capacidad para, superada una cota mínima de solvencia técnica, transmitir el mensaje de la música, a fin de cuentas lo más importante, se desplegó plenamente. >>

<< Por otro lado, no por romántico, y a fe que lo fue, pecó esta versión de excesos gestuales. Los momentos más peligrosos en tal sentido, el comienzo y el final del segundo movimiento, donde mereció especial mención de honor el clarinetista José Vicente Herrera, se salvaron con un equilibrio ideal entre precisión y flexibilidad. Y Goerner aún guardaba en la manga, como guinda de agradecimiento a las fuertes ovaciones, un andante de la Sonata D. 664 de Schubert sencillamente delicioso en su suspensión. >>

Por Alfredo Brotons
Diario de Levante 01/04/2012

Críticas de prensa del recital ofrecido por el pianista Nelson Goerner en las Jornadas de piano “Luis G. Iberni” en el Auditorio Príncipe Felipe de Oviedo.

Sublime Liszt

<< Goerner vuelve a Oviedo, con una trayectoria plenamente consolidada. Es un pianista más reconocido que popular, y con una concepción muy personal del repertorio romántico, en el que está especializado. Sobre todo Chopín –al compositor polaco le dedicó la segunda propina- y Liszt. >>

<< Elegancia en el fraseo, emoción contenida y belleza en las ideas son algunas de esas características con la que nos ofreció un Mozart de corte prerromántico muy atractivo, especialmente en el tiempo lento inicial de la “Sonata en Mi bemol”. >>

<< Un Schumann, bien interpretado y con unas ideas de frescura en las variaciones, pero más imbuido de Eusebius que de Florestán. >>

<< Lo excelente por excepcional y sublime llegó con la monumental “Sonata para piano en Si menor”, una versión absoluta, total. La recreación de Goerner tuvo, además de esa técnica prodigiosa necesaria para abordar una de las obras más imposibles del piano, varios rasgos característicos. El primero, la variedad del color tímbrico, sugerida por el piano que podía sonar como un arpa o como un órgano; el segundo, la riqueza de matices, increíbles en esos pianísimos al límite con el silencio, pero perfectamente audibles y unos “tutti” que parecían los metales de una orquesta y el tercero, la fantasía sonora por la que se enlazan episodios y se varían motivos al hilo de un discurso musical pleno de contrastes pero siempre emocional y vivo. >>

Por Ramón Avello
Diario El Comercio 06/03/2012

Impactante Goerner

<< Interesante, impactante y plenamente convincente ha sido la participación de Nelson Goerner en las Jornadas de piano “Luis G. Iberni”. >>

<< La entrega interpretativa hasta el límite en el detalle, aún manejando esquemas relativamente simples, es característica en intérpretes virtuosos que examinan todo el proceso sonoro con un rigor extremo y originalidad, a la misma altura de sus casi ilimitadas posibilidades técnicas. >>

<< En la “Sonata en si menor, S. 178” de Liszt Goerner echó el resto. Impresionante, por supuesto, en el control técnico y mecánico, pero, sobre todo, sobrecogedor por la desnuda fuerza perturbadora que extrajo del instrumento –de la obra-, al que no le quedó registro por explorar en posibilidades sonoras y expresivas. Volumen o extrema delicadeza, apasionamiento o introspección y, además, algo fundamental que sí se produjo de forma clara en la segunda parte, su capacidad de transmitir y emocionar. Dos propinas nos hicieron perder por unos instantes las ganas de volver inmediatamente a escuchar y sin descanso la misma sonata de principio a fin, el andante de la “Sonata en la mayor” de Schubert y el “Estudio No. 4 en do sostenido menor, Op.10, No. 4” de Chopín. Impactante. >>

Por Joaquín Valdeón
Periódico La Nueva España 07/03/2012

Nelson Goerner en el Ciclo de Grandes Intérpretes

<< El pianista argentino Nelson Goerner hizo su presentación en Madrid, con un recital interesante, empezó con una versión de la Sonata K.282 de Mozart, llena de lirismo y poesía (alucinante su Adagio). Un Mozart de juventud (de su etapa galante) que concentra sus mejores esencias en los movimientos lentos, lo que Goerner supo entender con un increíble nivel de madurez. Le siguió una excelente versión de la Kreisleriana de Schumann que, no por ingrata (me parece de lo más complicado del Schumann juvenil), dejó de sacarle un alto provecho. Donde el público se mostró más agradecido fue con la Sonata en Si de Liszt, que conformó la segunda parte, Goerner nos dio su versión, que es brutalmente canónica. Excelente, por tanto, pero por el momento sin el valor añadido que nos gustaría haber escuchado, y que seguramente los años le permitirán dar. Porque esa es la mejor conclusión de su concierto. Una realidad de virtuoso intachable, pero con unos mimbres que nos hacen pensar que el tiempo, sin duda, permitirá mejorar, que no es poco. Seguro que volveremos a disfrutar de su arte, en Madrid, en años venideros. >>

Por Juan Berberana

Revista Ritmo, Edición de mayo 2012